Audio 1: El truco de la respiración
Este es un ejercicio práctico, útil y sencillo que puedes hacer cada día para reducir el estrés, ser más consciente y aumentar el deseo.
Este ejercicio consiste en dedicar unos minutos al día a respirar profundamente y prestar atención consciente a la respiración. Para hacerlo, sigue estos pasos:
- Busca un lugar tranquilo donde puedas estar sola y sin distracciones.
- Siéntate cómodamente con la espalda recta y las manos sobre tus rodillas.
- Cierra los ojos y comienza a respirar profundamente por la nariz, inhalando durante 3 segundos.
- Siente cómo el aire entra en tus pulmones y cómo los pulmones se expanden.
- Mantén el aire en tus pulmones por unos 3 segundos y luego exhala lentamente por la boca, exhalando durante 3 segundos.
- Repite este proceso de inhalación profunda y exhalación lenta durante 3 ciclos más, prestando atención a cada respiración y manteniendo la misma duración de 3 segundos para la inhalación y la exhalación.
- Toma unos momentos para notar cómo te sientes después de completar el ejercicio de respiración consciente. Recuerda que los pensamientos juegan un papel muy importante aquí: A veces, pueden bloquear este momento de conexión y relajación corporal (¡ya sabes, por tener demasiadas cosas en la cabeza!). No te preocupes si eso pasa, es normal, y es cuestión de repetir este ejercicio y con la práctica ya verás como te resulta cada vez más sencillo desconectar para conectar contigo.
Te aconsejamos que repitas este ejercicio cada día. Reserva un espacio de tu día para bajar tensiones, conectar con tu cuerpo y, el principal objetivo: darte un momento para estar y conectar contigo misma.
Además, te enlazamos también una sesión de Mindfulness, te recomendamos hacerla cada día o casi cada día; eso te permitirá disminuir tus niveles de estrés y ansiedad. Recuerda que para que la sexualidad pueda fluir, primero es importante que te sientas relajada y conectada contigo misma.
CTA= Es momento de relajarte…
Gamificación Pantalla tipo C
¿CÓMO CREES TE AFECTAN LOS FACTORES EXTERNOS?
La familia:
a) ¡Ni lo pienso! Mi deseo sexual no se ve afectado por la familia en absoluto.
b) A veces, depende de la situación familiar, pero en general, tiene poco impacto en mi deseo sexual.
c) ¡Mucho! Los asuntos familiares pueden influir significativamente en mi deseo sexual.
El trabajo y el entorno laboral:
a) Muy poco, mi trabajo no interfiere en mi deseo sexual.
b) A veces, cuando estoy estresada o cansada, ¡no tengo ganas!
c) ¡Demasiado! Mi trabajo y el entorno laboral tienen un gran impacto en mi deseo sexual.
Mi relación de pareja:
a) Para nada, no influye
b) A veces, cuando hay conflictos o malentendidos, deja de apetecerme…
c) ¡Mucho! Los problemas en mi relación de pareja afectan considerablemente mi deseo sexual.